Como su puede ver en el vídeo de más abajo, un grupo de encapuchados ha perpetrado un ataque contra un acto en favor de la Diada en Madrid. El ataque se ha saldado con varios heridos.
Sin embargo, esto no debe sorprendernos. Hace unas semanas veníamos avisando ya en este mismo espacio (ver entrada titulada "verano azul") de la radicalización de las posturas conservadoras, que se ven necesitadas de manifestarse represivamente para enmascarar el miedo que sienten ante el fracaso de su modelo institucional. Estas manifestaciones de violencia no son sino los coletazos agónicos de un sistema que se resiste a perecer.
Pero no por ello dejan de ser peligrosos. Podemos observar que nadie se salva a sus odios, a sus iras, a sus manifestaciones violentas. Sedes de Izquierda Unida incendiadas (Moralzarzal, Torrejón de Ardoz), políticos socialistas privados de sus funciones en la oposición, un acto en favor de la Diada... Todo ello conduce a la misma reflexión: para la reacción no existe diferencia alguna entre quienes apostamos por un modelo estatal diferente. Rompen la barrera que los distintos matices imponen. Socialistas, comunistas, anarquistas, nacionalistas... Para ellos representamos un mismo bloque a destruir. No distinguen aquello que nos diferencia. Ven lo que nos une: nuestra apuesta por el cambio hacia el progreso, los valores de la república.
Desde este espacio volvemos a insistir en la necesidad de trabajar en conjunto por conformar un bloque republicano que esté por encima de las diferentes sensibilidades políticas y/o sindicales. Esta batalla no la ganará un sólo colectivo de manera individual, la historia demuestra que los heroísmos no siempre terminaron bien . Hoy se presenta la necesidad de aunar esfuerzos y oponer democracia frente a fascismo.
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